Existen amores esporádicos y a la vez eternos.
Por lo general comienzan en la adolescencia con la misma pasión con que luego se interrumpen.
Se reinician, casualmente, en la mediana edad, son más calmos pero no menos intensos, y se diluyen en el tiempo, casualmente.
Son amores permanentes aunque no continuados.

No son menos reales, valiosos e importantes en la vida de una persona que cualquier otro. Son, simplemente, distintos.
Quizás mi relación con la fotografía se asemeje a uno de ellos.
Comenzó en la adolescencia. Interrumpida en la juventud, a los 20 años me sedujo el cine, la retomé al filo de los 40.
Se volvió a interrumpir a los 50.
Ahora, a los 70 nos reencontramos. ¿Definitivamente?
No lo sé. De lo que sí estoy seguro es de que, cualquiera sea el desenlace final, esta relación fue y será inolvidable.

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Nací en marzo de 1940. Soy diseñador gráfico jubilado, hice cine y trabajé en televisión.
Gané el Primer Premio en el Segundo Concurso de Escuelas de Cine.
Fotográficamente me inicié en el Foto Club Buenos Aires, participé en Fotografía Abierta y del movimiento de fotógrafos independientes.
Realicé dos muestras individuales Entorno (1986) en Fotoespacio del Centro Cultural Recoleta y Fotos (1992) en el Foto Club Buenos Aires.
En 2005, junto a Alejandro Merle y Carlos H. do Souto (Caica) expusimos en el Centro Cultural El Séptimo Fuego de Mar del Plata.
Participé de numerosas colectivas, Autorretratos, La nueva mirada, Cámara pobre, Fotones y en la Muestra Nacional de las Primeras Jornadas Fotográficas.